EL VALOR DE LA PRODUCCION LOCAL. ENCUENTRO DEL PROYECTO REN EN PELLEGRINO PARMENSE, ITALIA. 21/07/2015

EL VALOR DE LA PRODUCCION LOCAL. ENCUENTRO DEL PROYECTO REN EN PELLEGRINO PARMENSE, ITALIA.

La joven emprendedora Silvina Muñoz, propietaria de una panadería y pastelería artesana, viajó a la ciudad italiana de Pellegrino Parmense para asistir al encuentro local del proyecto REN, red de municipios rurales europeos en el que participa el Concello de Camariñas.

Las delegaciones de Camariñas, Suecia, Croacia y de otros municipios italianos visitaron empresas rurales productoras de trigo y queso parmesano, ambos certificados, e intercambiaron conocimientos, debatieron técnicas para la mejora de la calidad de los productos e incluso compartieron recetas y técnicas culinarias.

Especial interés tuvo la visita a la fábrica de pan tradicional y ecológico de la familia Lusignani, que lleva tres generaciones haciendo pan artesanal con materias primas locales. Uno de los secretos de su éxito en Italia es haber conseguido rescatar los sabores tradicionales de su comarca.

El encuentro sirvió para destacar la importancia económica y social de la producción de las pequeñas empresas locales. Como aplicación práctica, cada participante prevé desarrollar nuevos productos y proyectos basados en la experiencia y conocimientos adquiridos. De esta forma, el encuentro cumplió con uno de los objetivos del Proyecto REN: revalorizar la producción en los municipios rurales a través del intercambio de experiencias. Los contactos hechos por Silvina Muñoz le van a permitir además autoabastecerse de algunas materias, logrando así dar valor añadido a sus productos.

También se visitó un campo de trigo tradicional, una granja de vacas cuya alimentación está estrictamente controlada para poder elaborar el auténtico queso Parmesano Reggiano y una fábrica donde se elabora este famoso queso, de calidad muy superior a las copias que se comercializan habitualmente.

Silvina Muñoz, que no pudo asistir al encuentro de Camariñas aunque se estuvo preparando en la Agencia de Desarrollo Local, viajó acompañada de su marido, Álvaro Rodriguez, gestor económico y copropietario de la empresa, además de consultor externo de gestión informática de almacenes.